El síndrome del centavo para el peso

Si uno es colombiano alguna vez en su vida ha oído la expresión: "como siempre, nos faltó el centavo para el peso".

Es cuestión de ver torneos deportivos, reinados de belleza, premios internacionales, etc. A veces falta un gol para clasificar al mundial, o faltaba que contestara bien una pregunta para que la eligieran miss universo, etc.

Y algunos periodistas y comentaristas sólo atinan a decir que ese es el destino colombiano, que siempre nos falta el centavo para el peso, que tenemos mala suerte, etc. Para mí es pura mediocridad. Alguna vez una profesora de Biología de la Nacional (en mis épocas de fallido estudiante de medicina) me hizo caer en cuenta de que eso no es cierto; yo perdí una materia con 2.93 es decir a dos centésimas del 2.95 que arrastraba al 3.0 y, como era de esperarse, salí rumbo a la oficina de la profesora a pedir cacao.

• Profe ayúdeme, mire que sólo me faltan dos centésimas
• No doctor (estuve a punto de escribir ingeniero), a usted no le faltan dos centésimas, a usted le faltan dos unidades y siete centésimas.
• ...Silencio sepulcral...

Nos acostumbramos a escudarnos en lo poquito que nos falta para alcanzar un resultado apenas aceptable, a echarle la culpa al ambiente, a la mala suerte y hasta al clima. Lo que debemos es dejar esa mediocridad de apuntarle al 3.0, a clasificar al repechaje, a pasar por arrastre, hay que apuntarle a la excelencia, apuntar alto, al 5.0, al primer lugar a la nota destacada.

Ojalá llegué el día en que digamos: "Me faltó el centavo para el peso, la materia me quedó en 4.93", o "Nos faltó el centavo para el peso, salimos campeones pero nos hicieron un gol en el mundial de fútbol".