lunes, julio 25, 2005

The Big Truman Show

Después de un muy esperado fin de semana es curioso regresar a la oficina y encontrar las cosas en el mismo estado en que se encontraban el viernes al dejarlas.

No es que yo esperara que los duendes del cuento (El zapatero y los duendes de los hermanos Grimm) hicieran mi trabajo durante el fin de semana. Es sólo que los problemas siguen siendo los mismos, ni se han empeorado ni han disminuido.

Eso me recordó una teoría un poco egocentrista de mi papá: él, cuando era niño, pensaba que el mundo solamente se movía en el área que él veía, que todo lo demás quedaba congelado si él no estaba presente.

Después cuando estaba de moda "La dimensión desconocida" en uno de los capítulos hay una historia similar donde un tipo se despierta en día que no es y se encuentra con los empleados que se encargan de hacer los "sets" para el trascurrir de la vida. Y moviéndose a voluntad en ese "universo paralelo" encuentra zonas en blanco, que se supone son las zonas en las que nadie va a pasar durante la hora que duraba ese escenario en funcionamiento. Es algo similar a lo de mi papá, aunque un poco menos egocentrista.

En general todos en algún momento nos hemos visto como los protagonistas de la historia del universo, como si todo lo demás estuviera alrededor nuestro sólo para ambientarnos la existencia. Aunque hoy en día exista esa proximidad entre todos los rincones del mundo que nos han dado la radio, la televisión y hasta el mismo internet. Aún así podría creerse que están ahí sólo cuando nosotros los consultamos.

Es un poco como la historia en "The Truman Show" llevada al extremo. Es como si estuvieramos todos aquí metidos en un gran reality del que desconocemos las reglas, los objetivos, los espectadores y el organizador del evento. Algunos nos dedicamos simplemente a participar del mismo, otros en cambio intentan encontrar las reglas que nos dirigen o al autor de las mismas.

¿Alguien ha podido hablar con alguno de los de producción del reality? Si es así me avisa a ver si logro que le den un giro a mi historia en el argumento y me ponen por ahí una lotería o una guaca escondida que me hagan mas soportable el no conocer las reglas del juego.

P.D. Voy a regalarle 5 minuticos de existencia a mi esposa en esta obra montada alrededor mio con una llamadita telefónica.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Este tema ha dado mucha tela que cortar a los filósofos... es muy divertido en realidad. Alguno decía, -y a mí me gusta- que no podemos probar que las cosas sigan existiendo mientras no las vemos... ¿cómo probar eso? Sólo apelando al sentido común, pero este argumento es débil, es como afirmar que el sol saldrá mañana por oriente sólo porque así ha sido durante mucho tiempo... mañana todo podría cambiar, y eso no estaría contemplado en la teoría hasta la fecha sólo porque no ha ocurrido... pero de ahí a que no pueda ocurrir... pues hay mucho trecho.
La pregunta sería entonces, no por si es posible probar estas cosas o no, sino, por si es relevante hacerlo... porque, de todas formas, pese a lo que este filósofo me dejó claro, confío plenamente, por ejemplo, en que alguien me espera en casa en este mismo momento.
Tal vez se trate de eso: saber o confiar...

Sofía.

Kafre dijo...

yo la verdad no se que decir alguna vez me dijeron que si en el medio de la selva un arbol cae si no hay alguien alrededor sera que hace ruido?

Anónimo dijo...

Este post ya no lo habías puesto hace como uno o dos meses? (Solo pregunto...)
En todo caso, si, a veces pareciera que la vida la maneja alguien con más poder que uno, salen oportunidades que no se esperaban ya, y cambia la vida sin darse cuenta... pero... al fin, si crees o no en el "destino"? Porque creo que en otro post dijiste lo contrario...