jueves, febrero 14, 2008

Y se rompió la cadenita...

Como era de esperarse empezaron a derrumbarse las pirámides y a reventarse las cadenas... Es que eso de que uno de un millón un mes y al mes le devuelvan el millón mas $350.000 y al otro mes $450.000 eso sólo lo creemos los colombianos.

Que estafa tan terrible. Lo más preocupante es que, al contrario de lo que uno creería, no solamente los ignorantes caen en eso. Si ven las noticias en televisón y leen en periódicos verán que muchos de los estafados son personas con títulos profesionales. Y es que parece que ni el estudio lo blinda a uno contra la avaricia y la insensatez.


Me acuerda del cuento de mi abuelita:

En una casa estaban haciendo dulce de icaco y, en un descuido, se cayó un ratoncito a la olla. La encargada del dulce le preguntó a la dueña de casa que que hacía con el dulce y ella le dijo - Sírvale un buen plato al bobo del pueblo que nunca come cosas ricas y el resto bótelo a la basura - Y así lo hizo.
El bobo al ver que le ofrecían ese plato sopero de dulce de icaco lo rechazó diciendo: - De eso tan bueno no dan tanto, o ¿es que me cree bobo? -



Tal parece que hay bogotanos, y colombianos, más bobos que el bobo del cuento...

1 comentario:

Anónimo dijo...

yo no se, probablemente seamos bobisimos, pero eso funcionaba bien hasta que la envidia de la superintendencia bancaria utilizo a los noticieros para derrumbar ese lavadero, que de hecho ni ilegal me parece